La experta israelí en geopolítica, Anat Hochberg Marom, dijo al periódico israelí Maariv que el descubrimiento del yacimiento de litio iraní podría conducir a un cambio en el balance de fuerzas regional, y darle a Teherán una posición geopolítica y económica sin precedentes, y agregó que “Israel” observará con interés cómo intentará Teherán aprovechar la reserva de litio en beneficio propio. 

Según el rotativo, la fortaleza militar de Irán y la renovación de sus relaciones con los países árabes, encabezados por Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Egipto, además de sus maniobras militares navales, incluso con India y Pakistán, constituyen un importante motivo de preocupación para “Israel”. 

Asimismo, se refirió al fortalecimiento de las relaciones estratégicas de Irán con Rusia, eso sin mencionar a China, así como sus estrechas relaciones con Indonesia, el país más grande del mundo islámico.

El periódico agregó, que se espera que la situación económica y la influencia geopolítica de Irán mejoren en gran medida muy pronto, y esto se produce en el contexto del descubrimiento de un enorme depósito de litio, que contiene 8,5 millones de toneladas del mineral, la segunda reserva más grande del mundo después de Chile, y esta se encuentra en la provincia de Hamadan, en el oeste del país.

Por lo tanto, esta reserva mineral no se limita solo al hecho de que contiene el 10 por ciento de las reservas mundiales del “oro blanco”, que actualmente se estiman en 89 millones de toneladas, pero en efecto,  el descubrimiento (que puede salvar la economía iraní y anular aparentemente la efectividad  de las sanciones que se le han impuesto)  es un “Joker ganador".

Según la experta israelí, este descubrimiento podría tener un impacto significativo en los mercados mundiales de la energía y de la minería, así como en la industria mundial de las baterías y automóviles eléctricos; se espera que todo esto conduzca a cambios de gran alcance en la economía y la política mundial, desplazando el centro de gravedad de nuevo hacia el Medio oriente. 

Un alto funcionario del ministerio de Industria y Minas de Irán dijo que se trata del reservorio de litio más grande del mundo ubicado fuera de Sudamérica (Argentina, Bolivia y Chile concentran el 58 por ciento de los recursos mundiales), y el segundo deposito más grande después del depósito chileno, que contiene 9,2 millones de toneladas de litio.

Este mineral es considerado la “joya de la corona”, debido a su enorme valor e importancia en la producción de baterías para diversas industrias electrónicas, incluidos los autos eléctricos, las computadoras portátiles, los teléfonos móviles, los paneles solares y los drones, así como para fines de almacenamiento de energía. 

Un giro en el mercado de la energía

Según el periódico israelí, este descubrimiento ofrece oportunidades económicas y una energía rara en grandes cantidades para el gobierno iraní.

Claro está que, aunque se desconoce la calidad y el costo de la extracción de litio, el solo hecho de poseer alrededor de una décima parte del consumo mundial de litio y controlar esta materia prima estratégica convertiría a Irán en un actor geopolítico importante en la política y en la economía mundial.

Ante la agudización de la crisis climática, el yacimiento de litio, junto con otras fuentes de energía, incluida la nuclear, se considera una fuente de poder e influencia para el gobierno iraní, tanto en lo político como en lo económico, al poseer la llave de una de las fuentes de energía.  

Se espera que se beneficie de estos recursos y que esto se refleje en los países de la región, incluso en el ámbito internacional.

Por lo tanto, no es solo probable, según el periódico, que esto aumente en gran medida la influencia de Irán, sino que más bien la misma superara con ello la influencia de los estados del Golfo, con un enfoque en los principales productores de petróleo del mundo, encabezados por Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, y esto podría cambiar el balance de fuerzas regional a favor de Teherán.

El periódico agregó que esto fortalecerá la posición negociadora de Irán en el marco de las diferentes alianzas y los acuerdos económicos y de seguridad, así como cambiará el peso de la influencia entre los diversos actores en el Medio Oriente y desviará el foco de atención del mercado petrolero al de la industria de extracción del “oro blanco”, el litio en la región.

Además de ello y desde una perspectiva económica de mediano a largo plazo, se espera que los precios del litio, que han aumentado en los últimos años debido a razones que incluyen el aumento constante en la demanda mundial de este recurso, así como el de las baterías de iones de litio para vehículos eléctricos, mantengan esa tendencia, lo cual impulsa en gran medida la economía iraní.

Una victoria internacional a nivel de conciencia

El diario israelí señaló que este descubrimiento constituye una victoria en términos de conciencia frente a Estados Unidos y sus aliados, y en particular “Israel”, y podría conducir  al establecimiento de  relaciones más estrechas con China y otros países del Sudeste Asiático, en particular Indonesia, y contribuir a fortalecer las relaciones entre el Medio Oriente y Asia.

Desde el punto de vista de Teherán, el descubrimiento de este depósito, aumenta de hecho su capacidad de maniobra entre un gran número de jugadores, lo cual podría conducir a una disminución de su dependencia de Estados Unidos y Occidente.

El diario concluyó diciendo que no cabe duda de que Irán, como país en el umbral de poseer energía nuclear, goza de poder político y económico, además de poseer fuentes de energía, y sumado a ello se caracteriza por su audacia, su desarrollo y su alta motivación, y a la luz del descubrimiento de las reservas de litio, se espera que sea muy “peligroso”, mucho más de lo que es ahora.

En marzo pasado, Irán anunció el descubrimiento de una enorme reservorio de litio, y la televisión estatal citó al funcionario del ministerio de Industria, Minería y Comercio, Muhammad Hadi Ahmadi, quien señaló, que “por primera vez en Irán, ha sido descubierta una reserva de litio en Hamadan, y esta reserva se estima en 8,5 millones de toneladas”.