El bloqueo económico, comercial y financiero de EE.UU. contra Cuba: Un caso de genocidio en cámara lenta (I)
El término “genocidio” fue utilizado por primera vez en 1944 por Raphael Lemkin, jurista judío polaco quien en 1939 había huido de la persecución nazi.
Quizás las páginas más tristes de la historia humana están relacionadas con la palabra genocidio, que merece clara definición, estudio cuidadoso y repudio intransigente. Vivimos en una época en que el desarrollo tecnológico permite genocidios a escala desconocida con anterioridad, al punto de poder destruir a la humanidad en un instante, ni más ni menos.
El término “genocidio” fue utilizado por primera vez en 1944 por Raphael Lemkin, jurista judío polaco quien en 1939 había huido de la persecución nazi: “La implementación de acciones coordinadas destinadas a la destrucción de los elementos decisivos de la vida de los grupos nacionales, con el objetivo de su aniquilación”.
El cruel e ilegal bloqueo económico, comercial y financiero de EE.UU. contra Cuba, es un ejemplo excepcional de genocidio, desarrollado durante más de seis décadas, sin precedentes en la historia, de manera sistemática y sanguinaria contra nuestro país.
Genocidio y masacres: Desde la opulenta Cartago a la Franja de Gaza
La Biblia describe el exterminio de los mediditas (Números, 31), cuando el ejército tribal israelita mató a todos los hombres medos, pero capturó mujeres y niños para usarlos como botín. Posiblemente el primer caso de genocidio planeado y perpetrado sistemáticamente fue la destrucción de Cartago a manos de los romanos al final de la Tercera Guerra Púnica (149-146 AC).
A la izquierda las ruinas de Cartago, cerca de la actual Túnez, a la derecha el norte de la ciudad de Gaza destruida por los bombardeos israelíes. Dos momentos de genocidio separados por XXII siglos en la historia. Imágenes de Mundo Antiguo y Times of Gaza.
Muchos ejemplos de genocidio, se hicieron en nombre de la “fe”. Las Cruzadas a Tierra Santa, constituyeron eventos de extrema violencia contra los habitantes del Levante (también llamado Cercano Oriente o más comúnmente Medio Oriente), cuyas consecuencias continúan creando genocidio y enormes peligros para la especie humana.
Las invasiones tribales nómadas se vieron frecuentemente acompañadas de actos de genocidio. En el siglo XIII, los ejércitos mongoles de Genghis Khan erradicaron naciones enteras. En total murieron entre 12 y 18 millones de personas, algo solo comparable con la conquista europea de América.
El continente africano fue masacrado. El salvajismo del rey Leopoldo II de Bélgica en el Congo causó entre dos y cinco millones de muertes.
En nombre de la “fe” han muerto más seres humanos que los que han sido “salvados”. Las Cruzadas, la espada viajando junto a la Biblia, y sus secuelas como el extendido conflicto del Medio Oriente, alcanzan hoy nuevas dimensiones de crueldad en la Franja de Gaza. Imágenes de Mundo Educaçao y Getty.
Siglos XX y XXI, apogeo del Genocidio. El imperialismo, el mayor y más cruel genocida
El imperialismo es la fase superior del capitalismo, en la cual la socialización de las fuerzas productivas es gigantesca, al mismo tiempo que la concentración y centralización de capitales y se consolida el dominio mundial de las potencias y la subordinación a los pueblos coloniales y dependientes. La tecnología y capacidades industriales llegan a niveles desconocidos antes. En esas condiciones se desarrolla el Genocidio al máximo.
En el Imperio Zarista, cientos de miles de judíos y musulmanes fueron asesinados, en los “pogromos”, entre 1903-1911.
El Japón imperialista masacró a europeos residentes en colonias asiáticas, indonesios, filipinos, malayos, birmanos, vietnamitas, pero las víctimas fundamentales del imperio japonés fueron los chinos (muchos millones de fallecidos), un ejemplo de extremo salvajismo, fue la masacre de Nankín.
En el genocidio contra el pueblo armenio unos dos millones de civiles armenios fueron asesinados en el Imperio otomano, entre 1915 y 1923.
El Holocausto nazi fue caso particular y extremo del genocidio, seis millones de víctimas asesinadas hicieron del Holocausto judío un crimen inconcebible e inolvidable en la historia de la humanidad.
Durante el Holocausto nazi también ocurrió un número mayor de víctimas no judías, casi nunca mencionadas. El número total de víctimas del Holocausto Nazi fue de entre 15 y 17 millones.
Otros ejemplos de genocidio fueron el “Terror Blanco” en España (1936 – 1945), con unas 130 000 ejecuciones extra judiciales; el fin del Virreinato británico de la India, cuando hindúes, musulmanes y sijs se atacaron los unos a los otros, gracias a los desajustes sociales de la herencia colonial con unos dos millones de víctimas; el dictador Rafael L. Trujilloordenó la masacre de los haitianos en la República Dominicana causando la muerte de 20 000 a 30 000 personas. Grandes masacres post-SGM ocurrieron por ejemplo en Argelia, durante la guerra de independencia murieron más de 300 000 civiles.
Vietnam: EE.UU. del siglo XX abrazan la bandera del genocidio internacional
Ya durante 1945 -1954, los franceses, la Legión Extranjera y sus aliados, en especial EE.UU., comenzaron el “Genocidio de Vietnam” hasta su aplastante derrota en Dien Bien Phu (1954).
EE.UU. que ya había cometido actos genocidas contra sus propios habitantes originales intermitentemente por largo tiempo (de hecho desde la colonización inglesa y después desde la incepción misma de la nueva nación), se embarca durante la etapa final del conflicto en Indochina, en incontables y bárbaros crímenes, y causó pérdidas y dolor incomparables a todos los pueblos de la región, en primer lugar a los vietnamitas. Al menos tres millones de civiles y soldados vietnamitas murieron durante la guerra.
Genocidio en Cuba de los siglos XIX y XX: La Reconcentración (1896 - 1898) y la masacre de los Independientes de Color (1912)
Desde la llegada de Cristóbal Colón a América hasta finales del siglo XIX, la población nativa del así llamado Nuevo Mundo disminuyó de 30 - 50 a 12 - 18 millones, quizás el mayor crimen de la historia, la “Singularidad” de la violencia social.
En Cuba, el genocidio comenzó desde los inicios mismos de la colonia española en la isla. Debo decir con mucha tristeza, que esos episodios trágicos de nuestra historia lejana y/o más reciente han sido menos estudiados de lo que ameritan por su importancia y significado en la formación y desarrollo de nuestra nación.
La Conquista conlleó la casi completa aniquilación de los nativos cubanos. La población aborigen de Cuba pereció en su mayoría durante los primeros 50 años de la colonización española, muchos murieron agotados por el trabajo, la pobre alimentación. El maltrato y enfermedades desconocidas traídas por los europeos.
El encuentro entre dos mundos, fue particularmente infeliz y desgraciado. Aunque no tratemos de entender los hechos históricos con los paradigmas de hoy, no cabe duda de la crueldad extrema de los europeos con los nativos de las tierras americanas y con los esclavos que más tarde trajeron de África.
La Reconcentración fue un crimen genocida puro y simple. En apenas unas semanas, unos 500 000 cubanos (de ellos no más de 100 000 eran hombres de edad militar) se vieron obligados a cumplir la orden de reconcentración del tristemente célebre Valeriano Weyler, de una población total de alrededor de 1 700 000. Se estima que entre 150 000 y 200 000 cubanos murieron principalmente de hambre y enfermedad, un escalofriante 10% de la población de Cuba. Pobres y ricos, niños y ancianos.
Weyler ordenó la concentración de la población rural del occidente cubano en núcleos urbanos que se convirtieron en campos de concentración, un ejemplo impar de genocidio. Se estima que para diciembre de 1896 unos cuatrocientos mil cubanos no combatientes se catalogaban como reconcentrados en lugares escogidos con ese objetivo.
La medida creó una situación espantosa, el gobierno colonial no era capaz de suministrar alimentos a estas poblaciones (ni siquiera a sus propias tropas), con graves condiciones de insalubridad, que provocaron hambrunas y epidemias. La Reconcentración acabó en marzo de 1898, en el más completo fracaso. Fue quizás el acto más brutal de la historia de Cuba.
La masacre de los “Independientes de Color”. Caín asesina de nuevo a Abel
Fue la represión de un levantamiento en reclamo por la igualdad social y política de los negros en la Cuba de principios de siglo XX. Comenzó el 20 de mayo de 1912 y trajo la muerte de más de 3 000 negros y mestizos en lo que no fue realmente una guerra sino una masacre. Muchos líderes del Partido Independiente de Color fueron asesinados después de haber caído prisioneros.
El levantamiento en Oriente, principal escenario del conflicto, estuvo encabezado por los dirigentes de los Independientes de Color: el Coronel Pedro Ivonet, quien había participado en la Invasión a Occidente durante la Guerra Necesaria, y Evaristo Estenoz, también oficial del ejército mambí.
El presidente José Miguel Gómez envió un contingente de refuerzo de más de 1 200 soldados hacia Oriente el 27 de mayo de 1912. Los grupos alzados en armas no eran numerosos, ni bien armados ni organizados.
Un hecho que frustró la magnitud del levantamiento fue la detención preventiva el 19 de mayo de 1912, de numerosos líderes de los “Independientes de Color”. La llamada Ley de Fuga sirvió para encubrir decenas de asesinatos.
Varios miles de personas fueron cazados como fieras por las fuerzas gubernamentales. La mayoría de los asesinos y de los asesinados habían sido compañeros de armas en el Ejército Libertador, para juntar ignominia a la tragedia.
Cuando triunfó la Revolución Cubana, el 1 de enero de 1959, la política exterior estadounidense, que ya había establecido su concepto de “enemigo” para conceptualizar al “campo socialista” y sus instituciones formadas desde el fin de la Segunda Guerra Mundial en los países de Europa oriental y central (en la Unión Soviética después de la Revolución de Octubre de 1917). Este concepto fue incorporado al repertorio de la Guerra Fría y de la lucha contra “la expansión del Comunismo” por todo el mundo.
A pesar de que la Revolución Cubana no había definido aún su carácter socialista, la potencia imperial inició un proceso de ahogamiento económico, financiero, comercial y cultural contra ella, que a lo largo de más de 60 años no hizo más que agravarse. De forma general podemos llamar a este proceso el “Bloqueo”, que incluiría casi todas o todas las formas de acciones no militares contra la República de Cuba y su Revolución, insisto incluso antes de que esta tomara un carácter socialista.
El bloqueo de Estados Unidos contra el pueblo cubano: Forma especial y “disimulada” de Genocidio
Sí, sin duda alguna es una forma especial de Genocidio, es un acto de exterminio sostenido y encubierto. La Revolución Cubana fue considerada desde el primer momento por el gobierno de EEUU como una afrenta al poderío imperial. A unos pocos meses del triunfo de la Revolución Cubana, a pesar no había definido aún su carácter socialista, insistimos, el presidente Dwight Eisenhower, suspendió la compra de la cuota azucarera y poco más tarde, rompió relaciones diplomáticas con Cuba el 3 de enero de 1961.
La convención para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio establece que genocidio es un delito de derecho internacional que se define por su intencionalidad de “destruir total o parcialmente a un grupo nacional...”.
Entre los actos característicos de genocidio señala: “Asesinato de miembros del grupo (nación), lesión física o mental de los miembros del grupo; sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o parcial...”
Suspensión del envió de petróleo estadounidense a Cuba y orden de no refinar petróleo soviético o de otros orígenes, una de las primeras acciones anticubanas.
Jamás en toda la historia de la humanidad un país completo se ha sometido a un bloqueo económico, comercial y financiero tan prolongado como el que 13 gobiernos de Estados Unidos han mantenido contra Cuba desde hace 60 años. De hecho una completa guerra económica, despiadada y cruel.
Oficialmente el bloqueo se inició el 7 de febrero de 1962, con la firma de una orden ejecutiva del presidente John F. Kennedy, mediante la cual se endurecían las sanciones económicas contra Cuba y se promovía su aislamiento internacional, con la intención evidente de propiciar la derrota de la revolución.
El objetivo principal del bloqueo es infligirle los mayores sufrimientos al pueblo cubano con la finalidad de distanciarlo de la revolución y de sus dirigentes, de tal manera que fuera la misma población la que acabara con la revolución.
El bloqueo o como lo llama incorrectamente el gobierno de Estados Unidos, embargo, se profundizó con la ley promovida por los senadores Robert Torricelli y Bob Graham en 1992, llamada Ley de la Democracia Cubana, que busca profundizar el aislamiento internacional de Cuba, sobre todo tomando en cuenta el grave daño que había significado la caída de la URSS.
Esta ley era algo así como el golpe de gracia que se le pretendía propinar a Cuba en el momento más difícil y consistía, en la prohibición a negociar con las filiales de empresas estadounidenses en cualquier parte del mundo; el otro aspecto de importancia es la prohibición a embarcaciones marinas a entrar en aguas estadounidenses si antes han tocado algún puerto cubano en el lapso de 180 días.
Unos años después, en marzo de 1996 se aprobó una nueva ley contra Cuba, esta vez patrocinada por el senador Jesse Helms y el representante Dan Burton, titulada: Ley para la libertad y la solidaridad democrática cubanas.
Esta ley hace énfasis en las sanciones internacionales contra Cuba, prohibiendo comerciar con filiales de empresas estadounidenses instaladas en terceros países, prohibición del financiamiento indirecto, exclusión del Gobierno de Cuba de la participación en todos los organismos del sistema de cooperación internacional, con amenazas a los organismos que acepten la participación de Cuba de reducir el aporte financiero a las mismas por parte del gobierno estadounidense, así como de descontar el monto de cooperación que le fuere aprobado a Cuba del financiamiento de la organización que lo hubiere realizado; insiste en que el bloqueo se eliminará cuando haya un hipotético gobierno de transición y gobierno democrático, que sería calificado de esa manera solamente por la “potestad y arbitrio” del gobierno de Estados Unidos, “prerrogativa” que está en contra de todo principio de la Ley Internacional.
Como se expresará en la segunda parte de este escrito, el bloqueo contra Cuba es un acto de Genocidio en cámara lenta, un acto cruel de intentar asfixiar, desintegrar a Cuba y a su pueblo, de crear el caos y llevar al país a una guerra civil de incalculables consecuencias.