“Israel” cometió una nueva masacre en la escuela Al-Tabein de Gaza durante las oraciones del amanecer, después de hablar sobre la necesidad de alcanzar una tregua y del apoyo europeo e internacional a la declaración tripartita emitida por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, el presidente de Egipto, Abdel Fattah El-Sisi, y el emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, quienes subrayaron la necesidad de poner fin a la crisis lo antes posible, alcanzar un alto el fuego, concluir un acuerdo sobre la liberación de rehenes y detenidos y fijar una fecha para la reanudación de las negociaciones.

No cabe duda de que, al volver a cometer masacres y atrocidades, los israelíes pretenden librarse de las presiones que exigen un alto el fuego, después de haber puesto a la región al borde de una gran explosión mediante la ejecución de tres grandes operaciones: el bombardeo de Hodeidah en Yemen, el asesinato del líder de la resistencia libanesa, Fouad Shokr, en el suburbio sur de Beirut, y el asesinato del jefe del buró político de Hamas, Ismail Haniyeh, en Teherán.

Al cruzar las líneas rojas en la región, el primer ministro israelí y los miembros de derecha de su gobierno buscaron, mediante la escalada, lograr lo siguiente:

Explotación de las elecciones americanas

Netanyahu intenta aprovechar la situación de la administración del presidente Joe Biden, que se ha convertido en un "pato saliente" tras anunciar que no se presentará a las elecciones debido a su estado de salud y mental, para presionar a los estadounidenses a participar en una alianza conjunta israelí-estadounidense contra Irán que Netanyahu pide desde hace tiempo.

Netanyahu quiere aprovechar el tenso ambiente electoral en los Estados Unidos afectado por el genocidio en Gaza, ya que "el apoyo a "Israel" es uno de los titulares destacados en la carrera electoral y en los discursos de los dos candidatos que compiten por principio de “quién es mejor para "Israel" y quién lo apoya más”.

Ganancia populista en "Israel"

Las últimas encuestas de opinión muestran que las acciones del Partido Likud han aumentado después de la escalada de Netanyahu en la región. En la última encuesta de opinión sobre los escaños que cada partido podría obtener en caso de elecciones, las acciones del Partido Likud aumentaron a 28 escaños, frente a 16 escaños. En los meses anteriores, el primero se produjo tras los acontecimientos del 7 de octubre, mientras que la proporción de la oposición "State Camp" disminuyó a 18 escaños, frente a los 45 escaños que tenía al comienzo de la guerra en Gaza. Las acciones de los partidos religiosos extremistas también subieron.

Lograr una imagen de logro

A través de la escalada, Netanyahu busca dar una imagen de un logro que puede tenerse en cuenta en paralelo con los múltiples fracasos que “Israel” sufrió durante y después de los acontecimientos del 7 de octubre, especialmente después del gran fracaso en alcanzar los objetivos de la guerra luego de diez meses de su inicio, y la incapacidad de subyugar la resistencia en Gaza.

A la luz del continuo desgaste en Gaza, el ejército y la derecha israelí gobernante necesitan lograr una imagen de logro antes de hablar de llegar a un acuerdo con Hamas que ponga fin a la guerra.

Recuperación del prestigio y disuasión regional

Los acontecimientos del 7 de octubre y la posterior guerra de exterminio en Gaza revelaron la debilidad que sufre “Israel” en términos de seguridad, ejército e inteligencia. Esta es la primera vez que la entidad muestra esta debilidad.

Además, la activación por parte de Hizbullah del frente de apoyo a Gaza, los ataques diarios contra sitios militares israelíes y la aparición de un defecto en la Cúpula de Hierro demostraron la erosión de la disuasión israelí de una manera que expone a la entidad a graves peligros que ha enfrentado, algo que no se había visto desde las guerras árabes con "Israel".

Por lo tanto, y con base en lo anterior, se puede decir que Netanyahu y el gobierno de extrema derecha no están principalmente interesados en ir a una tregua, pero lo que sí pueden presionar para llegar a una tregua es lo siguiente:

Una necesidad estadounidense

No lograr una tregua y detener la guerra en Gaza puede socavar las posibilidades de Kamala Harris de llegar a la Casa Blanca y la capacidad del Partido Demócrata de controlar el Congreso en las próximas elecciones del 4 de noviembre.

Por lo tanto, los estadounidenses presionarán para alcanzar esta tregua para afirmar ante los votantes indecisos y ante los votantes árabes y musulmanes que la actual administración fue capaz de detener la guerra, y así silenciar las voces disidentes dentro del Partido Demócrata que piden a Kamala Harris adoptar una posición clara sobre la guerra en curso en Gaza para detener el genocidio.

Contener la respuesta iraní

Puede que a los israelíes les resulte mejor contener la respuesta iraní, si la administración estadounidense no está interesada en entrar en una guerra importante en la región. Aunque Irán confirmó que respondería, su misión ante las Naciones Unidas destacó que alcanzar un alto el fuego permanente en Gaza es una prioridad, y cualquier acuerdo aceptado por Hamas será aceptable para los iraníes. Y añadió: "Esperamos que nuestra respuesta sea oportuna y de una manera que no perjudique un posible alto el fuego".

Lo cierto es que Irán busca preservar su soberanía y seguridad y disuadir a “Israel” en paralelo a no escalar los asuntos en la región para llegar a una guerra mayor como quiere Netanyahu. También busca detener el genocidio israelí en la Franja de Gaza, por lo que se preocupará por no llevar a cabo ninguna acción que los israelíes aprovechen para lograr sus objetivos, o por acusar a Irán de ser quien trastocó el acuerdo de alto el fuego.