Hungría no quiere a Suecia en la OTAN y Estados Unidos la castiga
Enconos y represalias caracterizan el funcionamiento del poderoso bloque que hoy empuja al mundo al borde de una guerra nuclear.
El senador republicano de Estados Unidos James E. Risch, miembro del Comité de Relaciones Exteriores, mantiene bloqueada una venta millonaria de armas a Hungría, en represalia a ese gobierno por negarle el ingreso a Suecia a la OTAN.
De acuerdo con Risch, para reanudar el contrato de 750 millones de dólares, Budapest debe admitir antes al país escandinavo como nuevo miembro, y no obstaculizar otros planes de expansión de la Alianza en la cumbre del próximo mes.
Por su parte, el Gobierno húngaro insistió en rechazar el polémico ingreso (también Turquía pone reparos), bajo el argumento de estar molesto con las ofensas, hostilidades y cuestionamientos sobre su "estilo de democracia", vertidos por autoridades suecas durante varios años.
Risch reconoció su influencia en la suspensión del negocio de las armas, y declaró haber remarcado al gabinete húngaro su preocupación por su negativa a los deseos del bloque.
Tal decisión demuestra el descontento creciente de otros miembros de la OTAN con la política húngara, que en muchos sentidos contradice el rumbo general de la Alianza y usa su derecho a veto tanto en la organización como en la Unión Europea para obstaculizar paquetes de financiación militar para Ucrania o de sanciones a Moscú.
Además, Hungría fortaleció los lazos energéticos con Rusia y eso destapó la desconfianza y las sospechas de otros aliados europeos.
Cuando Estados Unidos decide vender un volumen considerable de armamento y municiones, esos manejos deben ser aprobados por el presidente, en Washington, y por altos representantes de las Comisiones de Asuntos Exteriores del Senado y de la Cámara de Representantes.
El senador Risch anunció la anulación del contrato tras la visita a la Casa Blanca del secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, este martes, para discutir con el presidente Joe Biden la estrategia de incorporación del gobierno sueco a la Alianza.