Condena árabe e islámica al comportamiento de Suecia
Una amplia ola de condena y denuncia popular y oficial es la respuesta a los repetidos insultos al Noble Corán, además de llamados a boicotear a Suecia, y a tomar medidas para evitar que se repitan estos actos.
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Condenar el insulto al Noble Corán moviliza a los pueblos de la región árabe.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Irak inició una acción urgente desde el primer incidente en Suecia de insulto al Sagrado Corán, y dio seguimiento al asunto, aseguró el portavoz, Ahmed Al-Sahhaf, en entrevista con la red panárabe Al Mayadeen.
Al-Sahhaf ratificó el reclamo de la cancillería iraquí a su par sueca en cuanto a tomar medidas para evitar repeticiones del ofensivo acto.
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De acuerdo con sus declaraciones, los suecos respondieron de modo afirmativo al condenar tales acciones islamofóbicas, pero, al mismo tiempo, insistieron en considerarlas "una muestra de libertad de expresión".
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Al-Sahhaf explicó a la red panárabe que el canciller iraquí, Fouad Hussein, intensificó sus contactos con sus homólogos árabes e islámicos para celebrar una conferencia urgente, y varios apoyaron la posición de Irak en este llamado para enfrentar los insultos al texto sagrado.
El ministro Hussein recibió una llamada de su homólogo de Arabia Saudita, y ambos coincidieron en la importancia de realizar la reunión para tomar medidas colectivas necesarias.
La cancillería saudí denunció la concesión por parte de las autoridades suecas a algunos extremistas de los permisos que les autorizan a quemar y profanar ejemplares del Sagrado Corán, y.anunció que convocaría al encargado de negocios de la embajada sueca en el Reino para entregarle una nota de protesta.
Por su parte, la Oficina de Relaciones Exteriores del Gobierno Regional del Kurdistán de Irak anunció su enérgica condena al segundo insulto al Sagrado Corán en Estocolmo en estas semanas, y suspendió las actividades de representación del Gobierno del Kurdistán iraquí en Estocolmo.
Al-Azhar: El comportamiento de las autoridades suecas refleja extremismo y apoyo al terrorismo
Por medio de un comunicado emitido el jueves, Al-Azhar Al-Sharif, máxima referencia religiosa egipcia, denunció el continuo insulto al Sagrado Corán en Suecia y llamó a boicotear los productos de esa nación, en represalia.
Al-Azhar enfatizó: "Otorgar aprobaciones para quemar el Libro de Dios refleja políticas caóticas, extremismo odioso y apoyo al terrorismo".
En consonancia, advirtió, la falta de postura estricta frente a lo ocurrido en Suecia es "apoyo a estos crímenes".
Irán: ¿Tomará medidas la ONU para evitar que se repitan los abusos?
El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Hossein Amir Abdullahian, envió una carta al secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, donde patentizó la fuerte condena de su país al permiso repetido del gobierno sueco para abusar del Sagrado Corán y las santidades islámicas.
Amir Abdullahian transmitió las advertencias de Irán sobre las repercusiones de la continuación de estas acciones, cuyo objetivo es hostigar al Islam y difundir el extremismo, bajo el pretexto de la libertad de expresión.
De acuerdo con su mensaje, la continuación de estas provocaciones pondrá en peligro la paz y la convivencia pacífica entre los seguidores de las religiones monoteístas", advirtió.
Asimismo, pidió al secretario general de Naciones Unidas condenar este acto y a tomar las medidas necesarias de inmediato para evitar que se repita, como hacer un llamado a los estados miembros de la organización para enfrentar con fuerza a quienes están detrás de estas acciones.
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Por otro lado, en opinión del miembro del Consejo Político Supremo de Yemen, Mohammad Ali al-Houthi, la expulsión del embajador sueco es el paso apropiado en respuesta a la conducta de esa nación escandinava.
El Partido yemení Al-Haq también elogió la postura del gobierno iraquí hacia los responsables de la profanación del Sagrado Corán, y pidió a los gobiernos islámicos y árabes que hicieran lo mismo.
Este jueves, cientos de manifestantes irrumpieron en la madrugada en la sede de la embajada de Suecia en Bagdad, capital de Irak, en protesta por la autorización para una nueva quema de un ejemplar del sagrado Corán en Estocolmo, según informaron medios locales.
