"Cuatro de cada cinco personas que padecen hambre a nivel mundial están actualmente en Gaza", aseguró el economista principal del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA), Arif Husain.

En un informe comentado por la revista The New Yorker, el experto calificó la situación de alarmante, pues en esa región palestina cerca de 2,2 millones de habitantes está en una crisis alimentaria, y buena parte en un estadio peor.

Si el problema persiste o empeora, en los próximos seis meses todos enfrentarán una posible y completa hambruna, advirtió, lo cual confirma las intenciones de "Israel" al impedir la entrada de ayuda humanitaria a la Franja como parte integral de su agresión.

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Husain mencionó que, a nivel global, alrededor de otras 129 mil personas experimentan una forma catastrófica de hambre, mientras en Gaza son 577 mil. Esta proporción del 80 por ciento en un solo país es una crisis humanitaria sin precedentes.

Días atrás, otros medios norteamericanos como The New York Times reconocieron el sufrimiento de la población gazatí por la escasez de alimentos, agua y saneamiento, dificultades exacerbadas por los constantes ataques y la agresión terrestre israelí.

Resaltó además que la crisis humanitaria se agravó desde el cese temporal de las hostilidades, cuando “Israel” obligó a los residentes de la Franja a desalojar ciertas áreas residenciales y hacinarse en el sur.

Según estimados del periódico francés Le Monde, cerca de la mitad de las personas en Gaza estarán en una etapa de "peligro" para el 7 de febrero, con una desnutrición aguda y un incremento en las tasas de mortalidad.

Además, al menos una de cada cuatro familias (más de medio millón de personas), enfrentarán condiciones catastróficas de "fase 5", marcada por una grave escasez de alimentos con tendencia acelerada a la hambruna.