Golán sirio ocupado rechaza israelización de su sociedad
Una declaración de todas las aldeas repudió a quienes aceptan dar servicio voluntario en el ejército enemigo y portar sus armas, por considerarlo un acto de traición a su comunidad, historia y familia.
El pueblo del Golán sirio ocupado rechazó los intentos de israelización de su territorio durante la organización de una reunión masiva con todos los segmentos de sus cuatro aldeas, con motivo del aniversario de la “gloriosa huelga” (14 de febrero de 1982).
Mediante una declaración, apeló a la continuidad de su historia y al derecho de preservar el legado de sus padres y abuelos y proteger su identidad nacional.
En ese sentido, los presentes repudieron los proyectos de transformar su cultura y otras medidas, como el reclutamiento voluntario de unos pocos individuos en las filas del ejército de ocupación.
Según enfatizaron en su mensaje, los involucrados en el proyecto de reclutamiento para portar armas y vestir el uniforme del enemigo lo hacen engañados, y por tanto sus compatriotas los conminaron a rechazar tal opción y anunciar el regreso a su sociedad en un plazo no mayor a una semana.
Como comunidad, desautorización a cualquiera "que se atreva a traicionar a su familia y a su historia, y a involucrarse en proyectos que destruyen la sociedad y su noble legado".
Para ello invocaron la prohibición religiosa y el boicot social a todos los involucrados en este plan pecaminoso de aceptar dar servicio voluntario en el ejército del enemigo ocupante y emplear sus armas.
La decisión de boicotear a quienes participen afecta a todos los miembros de su familia, a menos que tomen la iniciativa de repudiar su comportamiento de manera pública.
El comunicado expresó su negativa a que estos individuos traicionen a su comunidad y a sus familias, o asuman cualquier rol en las escuelas, ya sea como maestros, guardias o trabajadores.
La declaración del pueblo del Golán sirio ocupado insistió en desarraigar de su sociedad todos los ejemplos de este fenómeno destructivo, y no aceptarlo ni ahora ni en el futuro, en línea con la letra y el espíritu del documento nacional donde encarnan su afiliación e identidad.
El 14 de febrero de 1982 los ciudadanos del Golán ocupado respondieron con una huelga integral abierta a la decisión de la Knesset israelí (Parlamento) de anexar el Golán a la entidad sionista e imponerles su identidad.
Desde entonces sus habitantes defienden sus principios, cultura y tradiciones y se adhieren a su pertenencia a su patria real, Siria.