Cuba y Venezuela condenan agresión electrónica contra Líbano
Cuba y Venezuela coinciden en que la agresión electrónica de "Israel" contra Líbano constituye una grave escalada del conflicto en Medio Oriente.
El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, rechazó el martes la agresión electrónica de "Israel" contra Líbano, con un saldo de miles de heridos y al menos nueve víctimas fatales.
Condenamos ciberataque contra el Líbano atribuido a "Israel", que ha causado la muerte de casi diez ciudadanos y dejado otras dos mil 800 personas heridas, manifestó Rodríguez en la red social X.
Estos hechos, añadió el canciller, "constituyen una grave escalada en el conflicto en Medio Oriente con graves e impredecibles consecuencias para la región".
Condenamos ciberataque contra el #Líbano atribuido a Israel, que ha causado la muerte de casi 10 personas y dejado otras 2.800 personas heridas.
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) September 17, 2024
Estos hechos constituyen una grave escalada en el conflicto en Medio Oriente con graves e impredecibles consecuencias para la región. pic.twitter.com/gCVVDvcHbm
Venezuela también condenó la explosión simultánea de una serie de dispositivos receptores de mensajes conocidos como Pagers en el Líbano.
"El Gobierno bolivariano expresa sus más sinceros sentimientos de cercanía al pueblo y Gobierno libanés por tan lamentable suceso, al tiempo que expresa un mensaje de aliento y solidaridad a los familiares de las víctimas y heridos", dijo en un comunicado el Ejecutivo.
Señaló que este "ataque articulado a través de un sofisticado método de terror e intimidación a la población se suma a las aborrecibles técnicas utilizadas por Gobiernos hostiles en la peligrosa y creciente escalada de tensión política y militar en el Oriente Próximo".
El comunicado oficial expresó que "este tipo de prácticas generadoras de violencia, víctimas mortales y destrucción, ocasionan, además, pánico y zozobra en la población civil indefensa".
Asimismo, hizo un llamado al "diálogo genuino para la solución de las diferencias» y para «el mantenimiento de la paz y el bienestar" de las naciones.
Conforme al reporte del ministro de Salud libanés, Firas Al-Abyad, nueve personas fallecieron como resultado de la explosión de dispositivos de comunicación inalámbrica y al menos dos mil 750 resultaron lesionados, 200 de ellos en estado crítico.