El Salvador y el reto de las elecciones
El autor analiza la situación en El Salvador a pocos meses de las elecciones presidenciales. La posición del actual presidente entre la población y las conversaciones de los partidos políticos para llegar a la unidad para enfrentar a Bukele.
El Salvador enfrenta serios retos que se abren a las próximas elecciones de febrero de 2024 en las cuales hay caminos torcidos, unos que conducen a la consolidación de un régimen autoritario que, según algunos, politizó a la Fuerza Armada y a la Policía, y eliminó de un golpe la separación de poderes, pero sin embargo las encuestas le dan un abrumador respaldo por su innegables resultados en el enfrentamiento a las pandillas.
Seguridad y publicidad se aúpan entre sí para convertir al presidente Nayib Bukele y a su partido Nuevas Ideas en los favoritos del público, al menos eso dicen las encuestas, y con grandes opciones de barrer en 2024, aun cuando la mayoría de los expertos legales consideran inconstitucional que el mandatario apueste por la reelección violando la Constitución.
A menos de un año de las elecciones presidenciales en El Salvador se respira un ambiente cargado de contradicciones, afirmaciones rayanas a la falsedad e indefiniciones.
La gran pregunta en las últimas semanas es cómo y quién frenará la reelección del presidente Bukele en las elecciones del 4 de febrero próximo, que por mucho que se diga es inconstitucional, pero avanza por un camino que parece indetenible.
Un artículo del diario El Faro, un medio digital que se precia de hacer periodismo "molesto" por los temas que aborda, divulgó que partidos opositores y la sociedad civil estaban a punto de concretar una candidatura presidencial única. Eso no ocurrió pero si surgió una candidatura que trajo a un exmilitar, Luis Campo, y a una exefelenista y defensora de los derechos humanos, Celia Medrano.
"Arena, FMLN, Nuestro Tiempo y Vamos han acordado impulsar una única fórmula presidencial para enfrentar a Nayib Bukele en 2024. Las negociaciones siguen en curso y se prevé aterricen en dos nombres esta semana. Los candidatos deberán ser propuestos por la sociedad civil", indicó el medio, algo que en los últimos días se diluyó cuando el FMLN apostó por su fórmula que encabezará Manuel "El Chino" Flores.
Una larga aproximación sobre el tema habla de reuniones, conciliábulos y acercamientos entre enemigos irreconciliables, la Alianza Republicana Nacionalista (Arena) y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), los polos opuestos del espectro político local, y otras agrupaciones de centro derecha.
Todos desmintieron esos planes aunque es sabido que figuras como el exmagistrado Eugenio Chicas reiteran la necesidad de que los partidos políticos cedan el espacio y apoyen una candidatura única para las próximas elecciones que provenga de la "sociedad civil".
El Bloque de Resistencia Popular (BRP) propone un Frente Amplio pero no anda ni andará en reuniones para escoger candidatos. El Faro miente, dijo de forma categórica el economista Cesar Villalona al ser preguntado sobre el tema.
El BRP le dijo al FMLN, a VAMOS y a Nuestro Tiempo que son los partidos los que deben ponerse de acuerdo e inscribir candidaturas, y les aclaró que nada con Arena.
Ya el FMLN en la voz de Manuel "El Chino" Flores desmintió que vayan a una alianza con otras agrupaciones políticas aunque si lo harían, puntualizó, con la sociedad civil, sindicatos, trabajadores, amas de casas, empresarios y gente de pueblo, entre otros.
No obstante, prosiguen los aprestos para ponerle una piedra en el camino al joven mandatario que hasta ahora hizo de la publicidad un arte que lo mantiene encumbrado entre sus compatriotas, algo que manipuló al extremo el 1 de junio al proponer en un mensaje al país tres acciones que cambian por completo el escenario político a sus compatriotas.
Reducir el número de municipios de 262 a 44, los miembros de la Asamblea Legislativa de 84 a 60 y una furibunda campaña contra la corrupción fueron vedete en una noche marcada por los olvidos. Esas propuestas crean un nuevo escenario, habrá cambios de leyes y otras acciones pero al final, aparentemente, Bukele saldrá adelante
Al respecto, hace dos meses el Instituto Universitario de Opinión Pública (Iudop) publicó una encuesta en la que el 63,4 por ciento de los entrevistados respondió que en la actualidad la economía es el principal problema que enfrenta la población. Solo el 15,2 por ciento señaló que el problema era la delincuencia, sin dudas la vedete en el mensaje presidencial.
Según el Centro de Estudios Jurídicos mucho se escribió, publicó y analizó sobre el mensaje del mandatario pero, subrayó, lo que fue atronador fue su silencio, nada dijo sobre la economía.
Las Candidaturas...
¿Quién es Luis Parada?
Parada, fue un militar salvadoreño originario del barrio San Jacinto, San Salvador, quien realizó su preparación en la Escuela Militar Capitán Gerardo Barrios. Entró al batallón de paracaidistas, estuvo destacado en Morazán en la Guerra Civil de los 80. Se graduó de la academia de West Point en Estados Unidos, se desempeñó como agregado militar adjunto en Washington, Estados Unidos y recaló en la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), donde se encontraba el día del asesinato de los jesuitas en 1989.
Después de la Guerra, migró con su esposa e hijos a Estados Unidos buscando mejores oportunidades, y estudio leyes, pero ahora quiere volver para participar en la política.
En escuelas "Gringas" obtuvo un doctorado en derecho internacional. Posteriormente fue contratado por el despacho norteamericano Foley Hoag. Como miembro de ese despacho. Con esta firma, logró el triunfo judicial de El Salvador contra la compañía Pacific Rim (hoy Oceana Gold) y sus aspiraciones de explotación minera en Cabañas, algo que se dice abrirá Bukele en una segunda etapa.
Parada considera que Bukele tiene una vocación autoritaria desde el 9 de febrero de 2020. "Busca concentrar el poder político, a expensas del orden constitucional de separación de poderes, para ello ha vuelto a politizar a la Fuerza Armada y a la Policía", dijo en una entrevista en línea con Diario El Mundo en torno al desprestigio de los Acuerdos de Paz desde el gobierno actual.
Parada sería una opción para algunos sectores que tratan de explotar su imagen como miembro de la diáspora que aporta más de medio millón de salvadoreños con derecho al voto en el exterior, un filón nada despreciable.
Sin embargo, ya el FMLN se adelantó a esta coyuntura cuando "El Chino" Flores inscribió su candidatura presidencial a las internas de la tolda roja llevando a Werner Marroquín, un luchador y activista social en California como compañero de fórmula, o sea para vicepresidente, algo que es interpretado como un esfuerzo para que se vea que toman en consideración con hechos a la diáspora.
El exdiputado Manuel "Chino" Flores y Werner Marroquín se inscribieron el 27 de mayo como precandidatos para competir por la candidatura a presidente y vicepresidente por parte FMLN, respectivamente. El domingo 28 termina el período para que los precandidatos se inscriban bajo la bandera del FMLN.
El proceso hacia las urnas en El Salvador aun puede deparar sorpresas pese a que Flores negó una coalición con otros partidos políticos, y más cuando Bukele cambió las reglas del juego con dos de sus tres propuestas el 1 de junio.
Y mientras suenan los tambores de la "guerra electoral " en El Salvador, una investigación del Laboratorio de Opinión Pública de la Facultad Multidisciplinaria de Occidente de la Universidad de El Salvador (UES) encontró que en el occidente del país Bukele tiene una nota de 9,1 de 10 entre la población de Santa Ana, Ahuachapán y Sonsonate.
A los entrevistados se les preguntó si votaría nuevamente por Bukele como presidente de la República, "en una eventual reelección": respondieron afirmativamente el 90 por ciento de los santanecos, el 89 de ahuachapanecos y el 91 de sonsonatecos.
El estudio indicó que a su cuarto año de gestión, la aprobación al mandatario salvadoreño es elevada, en especial por su gestión en seguridad.
Estas y otros temas conforman hoy el ambiente en el país, y si se toman en cuenta lo que dicen las encuestas, habrá reelección y otra nueva etapa del bukelismo a partir de junio de 2024.