Hamas y el fin de "Israel"
Los términos del conflicto entendidos desde la versión occidental son tan falsos como esa misma idea del hogar nacional para los judíos que los padres del sionismo inventaron entorno a "Israel".
Más que núnca el conflicto con la entidad sionista sobrepasa los calificativos para señalar las salvajadas israelíes y las verdades de su proyecto en Palestina y el entorno regional.
El centro de gravedad de este proyecto es someter a la región, desmembrarla, desestabilizar las poblaciones y perpetuar la dominación de occidente con múltiples estrategias y planes durante más de siete décadas de un conflicto sin futuro para "Israel" y sus sueños mesianicos donde la resistencia de los árabes de generación en generación parece difícil sino imposible de apagarse.
La reactivación del conflicto no es ni cíclica ni lineal, es constante y progresiva acumulando experiencias y adquiriendo más sabiduría para los objetivos finales. Las derrotas del pasado hoy convertidas en puntos de fuerza. Irak, Siria y anteriormente en Libano, Jordania y Egipto los fracasos militares y sus consecuencias políticas se convierten en impulsos para una nueva fuerza que resurge organizando de nuevo un despertar colectivo firme, decidido en dar la batalla y no doblegarse.
"Israel" como sueño sionista manipulando el sufrimiento judío y fundada sobre mitos religiosos falsos es un proyecto que se gestó para reforzar y acompañar la expansión colonial británica en sus posesiones orientales teniendo enfrente esa obsesión occidental de que "quién controla oriente domina el mundo".
Las cruzadas contra oriente se reinventan de nuevo con el surgimiento del sionismo y lo convierten en la avanzadilla de Occidente en Palestina y la región árabe. La alianza del sionismo con las potencias atlánticas va más allá de los significados históricos que cada cual puede interpretar en relación a la cuestión judía. se trata de una alianza estratégica que persigue edificar la dominación global de occidente golpeando fuerte en el epicentro de oriente que es Palestina.
Los términos del conflicto entendidos desde la versión occidental son tan falsos como esa misma idea del hogar nacional para los judíos que los padres del sionismo inventaron entorno a "Israel". Historicamente el sionismo ha sido la peor opción dentro de muchas soluciones y respuestas que se perfilaron para resolver la cuestión etno-cultural judía en el ámbito europeo.
El desarraigo de las comunidades judías a lo ancho y largo del mundo alimentando el miedo y la desconfianza en sus filas es un arma al cuál recurre de forma muy hábil y permanente la agencia judía mundial y distintas instituciones vinculadas al Mossad transformando a los judíos del mundo en carne de cañón para las ambiciones de la alta clase judía europea que hoy dia lleva el negocio de la industria del holocausto.