Anatomía de un golpe a la democracia en Brasil
Justo una semana después de la toma de posesión de Lula, una turba violenta de manifestantes asaltó el Supremo Tribunal Federal, el Congreso Nacional y el Palacio del Planalto en el intento de desconocer los resultados electorales.
“No hay ningún precedente en la historia de Brasil sobre lo que ha pasado este domingo y por esos hechos serán castigados los responsables”. Así se expresaba el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, en su primera aparición pública tras conocer que grupos de seguidores de Bolsonaro asaltaron los edificios de los poderes públicos en Brasilia y provocaron graves daños materiales a los inmuebles.
La sede del Congreso, de la Presidencia y del Tribunal Supremo, se convirtieron el domingo 8 de enero en el escenario de una invasión protagonizada por miles de manifestantes que exigían una intervención militar para sacar del poder al hombre, que por voto popular, ganó las elecciones el pasado año.
Ante la magnitud de tales actos vandálicos el presidente Lula decretó la intervención federal en Brasilia, lo que supone el control de la seguridad de la capital. El asalto duró cerca de dos horas y sobre las 17:00 hora local la policía ya tenía el control de las tres instituciones del estado.
Hasta el momento cerca de mil 200 personas fueron detenidas por la Policía Civil del Distrito Federal, pero esto es solo la punta del iceberg. ¿Quiénes organizaron y financiaron estas manifestaciones? Esas interrogantes guían la ruta de la investigación que iniciará ahora el nuevo gobierno de Brasil.
Se busca a los responsables intelectuales
El diario brasileño Brasil de Fato publicó este domingo que el gobernador del Distrito Federal, Ibaneis Rocha, puede ser considerado uno de los responsables directos de las escenas de vandalismo en Brasilia. Una idea que también avalan líderes políticos y movimientos populares que se manifiestan contra la invasión del Supremo Tribunal Federal, el Congreso Nacional y el Palacio del Planalto.
Varias “extrañas” coincidencias lo relacionan con las manifestaciones. La principal es la elección del ministro de Justicia de Jair Bolsonaro, Anderson Torres, para el cargo de secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal. Aunque Rocha ya se apresuró a destituirlo del cargo luego de los hechos del domingo y pedir disculpas públicas a Lula, las evidencias ya están todas expuestas.
Justo una semana después de haber asumido su nueva función, el ahora exministro de Seguridad Pública del Distrito Federal Anderson Torres viajó de vacaciones a Orlando, Estados Unidos, el mismo lugar donde permanece Bolsonaro y coincidentemente se encontraba fuera del país cuando estos hechos acontecieron. El Tribunal Supremo ya tiene pedidos de prisión para Torres.
El ministro del Supremo Tribunal Federal, Alexandre de Moraes, decidió en la madrugada de este lunes 9 de enero destituir al gobernador del Distrito Federal, Ibaneis Rocha por 90 días.
De acuerdo con Moraes, Ibaneis “no solo hizo declaraciones públicas defendiendo una falsa 'manifestación política libre en Brasilia' —a pesar de que todas las redes sabían que se realizarían ataques contra las instituciones y sus miembros— sino que también ignoró todos los llamados de las autoridades llevar a cabo un plan de seguridad similar a los llevados a cabo en los últimos dos años, el 7 de septiembre, en particular, con la prohibición de entrada de delincuentes terroristas a la explanada de los Ministerios, habiendo liberado amplios accesos”.
Otro dato interesante, los militantes bolsonaristas antes de ejecutar el asalto, caminaron durante casi tres horas por avenidas importantes de Brasilia en dirección a las principales instituciones democráticas de la República, sin ningún tipo de impedimento. Todo lo contrario. Avanzaron ante la mirada pasiva de las fuerzas policiales. ¿Por qué se demoró tanto en frenar las manifestaciones? ¿Quién debía dar la orden de impedirles llegar a los predios del Congreso Nacional, el Supremo Tribunal Federal y el Palacio del Planalto?
Responsable por la seguridad de Brasília, el Distrito Federal es gobernado por un aliado de Bolsonaro. Este domingo la Policía Militar del DF aparece en este video escoltando la marcha antidemocrática antes de la invasión a las instituciones. pic.twitter.com/p9ACodQkCD
— André Vieira (@AndreteleSUR) January 8, 2023
Algunos usuarios mostraron en redes sociales imágenes de cómo varios policías no ofrecieron resistencia y en cambio guiaron a los manifestantes a las puertas de los edificios estatales. Sobre este tema el presidente de Brasil alertó que hubo “algún tipo de incompetencia, de falta de voluntad de las autoridades que cuidan de la seguridad pública del distrito federal”.
Por eso, Lula aseguró que “los policías que participaron no quedarán impunes porque no generan confianza a la sociedad brasileña. Hay que garantizar que eso no vuelva a suceder en Brasil, que sean castigados de forma ejemplar para que nadie más ose jugar con la bandera nacional, cargarla en las espaldas para ir a romper las instituciones brasileñas. Eso nunca había pasado en este país. Ni en la lucha armada en los años 70 sucedió que un grupo fuese a hacer ese desorden en el Palacio, la Corte y el Congreso”.
A partir de la noche del propio domingo inició la investigación para hallar a los responsables de la turba, desde los que ejecutaron los destrozos en los edificios hasta los que pagaron los autobuses de los manifestantes y su comida, e incluso se indaga en la participación de cualquier miembro del gobierno federal.
Estive agora à noite no Palácio do Planalto e no STF. Os golpistas que promoveram a destruição do patrimônio público em Brasília estão sendo identificados e serão punidos. Amanhã retomamos os trabalhos no Palácio do Planalto. Democracia sempre. Boa noite.
— Lula (@LulaOficial) January 9, 2023
📸: @ricardostuckert pic.twitter.com/qkyVZHQQdz
Los extremistas pro-Bolsonaro que invadieron y destruyeron los edificios de los Tres Poderes este domingo también atacaron al menos a nueve profesionales de la prensa, según datos del Sindicato de Periodistas Profesionales del Distrito Federal (SJPDF). Una fotoperiodista del portal Metrópoles fue atropellada y golpeada por 10 hombres, además de sufrir daños en su equipo de trabajo. A todas luces, atacar a los trabajadores de la prensa formaba parte de un mecanismo para borrar las evidencias sobre los hechos vandálicos que ocurrieron en Brasilia.
El actual mandatario brasileño denunció en la conferencia de prensa, ofrecida tras conocer la situación, que los sucesos de este domingo fueron alentados y estimulados por el expresidente Jair Bolsonaro. “No vamos a renunciar. Perdí otras elecciones y en ningún momento me vieron o un militante me vio, hacer alguna objeción al presidente electo en ese momento. El expresidente no solo lo estimuló sino que lo alienta por las redes sociales para que continúen con estas protestas, él (Bolsonaro) huyó”, expresó Lula.
Además, agregó: “Todo el mundo sabe que hay varios discursos del expresidente alentado este tipo de acciones, alentó la invasión de la suprema corte, el allanamiento que se hizo, no alentó la invasión de su casa porque vivía ahí. Siempre que puede, ha animado a este tipo de violencia hacia los poderes públicos, vamos a responsabilizar también a los partidos que lo apoyan.”
América Latina rechaza intento de golpe de estado en Brasil
Mandatarios de América Latina al igual que jefes de estado de otras regiones y organismos internacionales condenaron el intento de golpe de estado en Brasil. El presidente de Colombia, Gustavo Petro manifestó su solidaridad con Lula y calificó el hecho como fascismo, “las derechas no han podido mantener el pacto de no violencia”, publicó el jefe de estado colombiano en twitter. En la misma red social los presidentes de Chile, México, Argentina, Venezuela, Cuba, entre otros, expresaron su total apoyo al gobierno de Lula.
"Reprobable y antidemocrático el intento golpista de los conservadores de Brasil azuzados por la cúpula del poder oligárquico, sus voceros y fanáticos. Lula no está solo, cuenta con el apoyo de las fuerzas progresistas de su país, de México, del continente americano y del mundo", escribió el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
El mandatario de Venezuela Nicolás Maduro, por su parte expresó en un tuit su respaldo a Lula y agregó que su gobierno “rechaza de manera categórica la violencia generada por los grupos neofacistas de Bolsonaro que han atacado las instituciones democráticas de Brasil”.
Cristina Fernández de Kirchner, quien también es sometida a una persecución política por sus enemigos de la derecha en Argentina tiene vasta experiencia para interpretar este tipo de ataques contra la democracia.
En twitter, la vicepresidenta argentina ratificó su apoyo al presidente brasileño y añadió que “quienes creemos en lo nacional, popular y democrático debemos darnos además un análisis profundo y descarnado frente a este fenómeno que más allá de la existencia de organizadores, financiadores y responsables (que siempre los hay) captura a segmentos de la población (inclusive algunos en contra de sus propios intereses económicos) para jaquear la democracia”.
Las imágenes de hoy en Brasilia replican con exactitud las imágenes del 06/01/2021 en el Capitolio de Washington. No es casual… pic.twitter.com/YnVU0GsQwm
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) January 8, 2023
Organizaciones regionales como la CELAC y El ALBA- TCP también expusieron su respaldo al presidente elegido por las urnas en Brasil. La alianza bolivariana emitió un comunicado donde indica que los países del bloque rechazan los graves hechos de violencia perpetrados en Brasil y además hizo "un llamado a estar alertas ante los intentos de quebrantar los principios básicos de la democracia como lo es el respeto a la ley, a las instituciones y a los resultados electorales".
Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres expresó: “Condeno el asalto de hoy a las instituciones democráticas de Brasil. La voluntad del pueblo brasileño y de las instituciones del país debe ser respetada. Confío en que así será. Brasil es un gran país democrático.”
Desde Europa destacan los pronunciamientos del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, quien también condenó "rotundamente el asalto al Congreso de Brasil e hizo un llamamiento al inmediato retorno a la normalidad democrática".
Además el presidente francés, Emmanuel Macron, tuiteó en portugués que "la voluntad del pueblo brasileño y las instituciones democráticas deben ser respetadas" y dijo que Lula puede contar "con el apoyo incondicional de Francia".
El secretario de estado de Estados Unidos, Antony Blinken publicó en su perfil: “Condenamos los ataques a la presidencia, el congreso y la Corte Suprema de Brasil hoy. Usar la violencia para atacar las instituciones democráticas es siempre inaceptable. Nos unimos a Lula para instar al cese inmediato de estas acciones”.
Sin embargo, es importante destacar que omitió el dato no menos importante sobre la presencia del expresidente brasileño en su país. Las investigaciones posteriores revelarán si la embajada estadounidense tuvo algo que ver con las protestas, teniendo en cuenta la tradición de esas sedes diplomáticas de conspirar en golpes de estado en América Latina.
We condemn the attacks on Brazil's Presidency, Congress, and Supreme Court today. Using violence to attack democratic institutions is always unacceptable. We join @lulaoficial in urging an immediate end to these actions.
— Secretary Antony Blinken (@SecBlinken) January 8, 2023
¿Qué dice Bolsonaro?
Después de varias horas de silencio, Jair Bolsonaro decidió pronunciarse sobre lo acontecido y lo hizo desde su cuenta en la red social Twitter: “Repudio las acusaciones, sin pruebas, que me atribuyó el actual jefe del ejecutivo de Brasil”. Luego continuó con una lista de lo que considera méritos de su administración.
Para sorpresa de sus seguidores, criticó en un intento de desmarcarse de los sucesos del domingo, la violencia de la turba que invadió las instituciones de los poderes públicos.
“Las manifestaciones pacíficas, en forma de ley, son parte de la democracia. Sin embargo, las depredaciones e invasiones de edificios públicos como las ocurridas hoy, así como las practicadas por la izquierda en 2013 y 2017, escapan a la regla”, apuntó. Las comparaciones no aplican en este caso, pues como indicó Lula, los ataques a los tres poderes no tienen precedentes en el país.
- Manifestações pacíficas, na forma da lei, fazem parte da democracia. Contudo, depredações e invasões de prédios públicos como ocorridos no dia de hoje, assim como os praticados pela esquerda em 2013 e 2017, fogem à regra.
— Jair M. Bolsonaro 2️⃣2️⃣ (@jairbolsonaro) January 9, 2023
“A lo largo de mi mandato siempre he estado dentro de las cuatro líneas de la Constitución, respetando y defendiendo las leyes, la democracia, la transparencia y nuestra sagrada libertad”, añadió el exmandatario.
Al parecer, el expresidente olvida la lista de pedidos de impeachment en su contra durante su mandato, precisamente por los continuos fallos en su gestión. El hecho de no encontrarse en Brasil cuando ocurrieron estas manifestaciones violentas no lo exime de responsabilidad, teniendo en cuenta que el expresidente configuró el escenario previo.
Bolsonaro nunca reconoció públicamente los resultados electorales, decidió también viajar a Estados Unidos y no participar en la toma de posesión. En los días previos a la investidura de Lula, continuó alentando a sus seguidores que bloqueaban carreteras o acampaban frente a cuarteles militares.
No era preciso que diera la orden. Sin embargo, las medidas tomadas por el Tribunal Supremo empezarán a mostrar ciertas luces sobre quiénes están detrás de este golpe y los resultados no pueden sorprendernos, ya se trate de miembros del anterior ejecutivo o figuras actuales con las cuales Lula intenta formar un gobierno de coalición.
El actual presidente se enfrenta al desafío de unir a un país cuya polarización política es quizás la herida kamikaze que más lo daña. Trabajar en esas fisuras y solucionar a la vez todas las demandas sociales que la nación exige, representan la prioridad en la gestión de Lula.
Sin embargo, sus enemigos políticos cambiaron quizás el orden de estas prioridades, pues ante los actuales acontecimientos se vuelve urgente mantener el orden y el control de los poderes públicos sobre bases legales, mientras encuentran a los autores intelectuales de este golpe a la democracia.