Gustavo Petro recibirá un país con un alto déficit fiscal
El nuevo Gobierno colombiano calificó el nivel del déficit fiscal del país de “crítico” y destacó la importancia de la reforma tributaria que propone el nuevo presidente a partir del 7 de agosto.
“La realidad fiscal del país es una gran preocupación. El nivel de endeudamiento y de déficit fiscal que encontramos para el próximo cuatrienio es crítico”, denunció Daniel Rojas, uno de los coordinadores de la comisión de empalme del mandatario electo de Colombia, Gustavo Petro.
Ante esta realidad es importante la reforma tributaria del nuevo presidente que se cursará en el Congreso del país en el marco de la financiación del Programa del Gobierno de Petro, enfatizó Rojas.
También avisó que el nivel de recaudación de Colombia está por debajo de América Latina y de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos.
Igualmente resaltó como fatales las deudas con el sector salud (cuatro mil 600 millones de dólares) y la falta de ejecución de créditos ya desembolsados por el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, así como el desvío de recursos destinados a financiar el acuerdo de paz firmado en 2016 con la exguerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
Conforme a las estimaciones de las autoridades entrantes, el déficit Fiscal de Colombia para el año en curso, sería 5,6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que la deuda pública rondaría el 56,5 por ciento del PIB.
Gustavo Petro asumirá el próximo domingo 7 de agosto el poder como el primer presidente de izquierda en la historia de Colombia, con una agenda de reformas profundas, como su modelo económico y la ley tributaria.
El nuevo mandatario colombiano urgió una reforma tributaria que se enfoque en los dividendos que será obligatorio declararlos y siempre tendrán que pagar impuestos.
Petro ha explicado que la mayor carga estaría orientada sobre las cuatro mil más grandes fortunas de Colombia.
Dentro de ese conjunto, no apuntarán hacia las empresas productivas, sino los activos improductivos, mencionando los dividendos y las transferencias al extranjero, había detallado Petro.