Rusia condena prohibición israelí a actividades de la UNRWA
La cancillería de Moscú calificó las medidas como extremadamente decepcionantes y merecen condena pues durante décadas ha sido un pilar fundamental de apoyo para los palestinos en los territorios ocupados y países vecinos.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia condenó este sábado la decisión de “Israel” de prohibir las actividades de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en Jerusalén.
En un comunicado, la cancillería rusa expresó que estas medidas son arbitrarias, extremadamente decepcionantes y merecen condena. Asimismo, advirtió sobre sus graves consecuencias humanitarias para los palestinos.
Desde hace décadas, la misión de la UNRWA es un pilar fundamental de apoyo para los palestinos en los territorios ocupados y países vecinos. Por lo tanto, debe continuar hasta alcanzar una solución pacífica y definitiva al conflicto palestino-israelí, afirmó el documento.
Asimismo, Rusia reiteró su postura a favor de una solución que incluya la creación de un Estado palestino independiente y soberano dentro de las fronteras de 1967, con Jerusalén Este como su capital, coexistiendo en paz y seguridad junto a "Israel".
La declaración rusa responde a las exigencias del embajador israelí ante la Naciones Unidas, Danny Danon, a la UNRWA para que cese sus actividades en Jerusalén y desaloje sus instalaciones en Gaza antes del 30 de enero.
Danon envió una carta al secretario general de la ONU, António Guterres, donde reiteró la demanda.
Guterres, por su parte, enfatizó que, en caso de detener las actividades de la Agencia en los territorios palestinos, incluida Jerusalén, "Israel", como potencia ocupante, debe garantizar los servicios que la agencia proporciona.
La UNRWA, por su parte, destacó que los habitantes de Gaza necesitan, además de alimentos, enterrar a sus seres queridos, reconstruir sus hogares destruidos y restaurar sus vidas.
La prohibición de las actividades de la institución de la ONU en Jerusalén y el desalojo de sus instalaciones entraron en vigor el jueves pasado, en cumplimiento de dos leyes aprobadas por la Knesset el 28 de octubre de 2024.