Slogan
Periodista y comentarista
Robert Inlakesh sostiene que los cambiantes planes militares de "Israel" en Gaza, cada uno presentado como “decisivo”, fracasaron y dejaron al descubierto que la estrategia de ocupación no es ni práctica ni ganable.
Robert Inlakesh sostiene que la normalización de las relaciones de Siria con Israel ha erosionado su soberanía, profundizado la inestabilidad y convertido al país en una herramienta de la política estadounidense-israelí; una advertencia para el mundo árabe.
En su artículo, Robert Inlakesh sostiene que los esfuerzos de Estados Unidos por desarmar a Hamas, Hizbullah y las Unidades Populares de Militancia de Irak están desconectados de las realidades regionales y fracasarán, con el riesgo de generar una mayor inestabilidad en lugar de paz.
Los ataques conjuntos de Estados Unidos e "Israel" contra Irán marcan el colapso del orden internacional posterior a la Segunda Guerra Mundial, con flagrantes violaciones de la Carta de las Naciones Unidas, desprecio por el derecho internacional y el silenciamiento de las instituciones globales destinadas a defender la paz y la justicia.
Se sucedieron amenazas y amenazas, pero lo único que siguió materializándose fueron ataques aéreos contra civiles en Gaza.
Los enemigos de Siria no son los mismos que los de los israelíes, porque los enemigos de los israelíes incluyen a los propios sirios, junto con los palestinos, libaneses, jordanos, egipcios, iraquíes y otros.
Las supuestas tensiones entre Estados Unidos e "Israel" son en gran medida teatrales y ocultan un continuo apoyo bipartidista y una alineación estratégica tras bastidores.
Robert Inlakesh analiza cómo el nuevo liderazgo de Siria bajo Ahmad al-Sharaa está cortejando la normalización con "Israel" desde una posición de debilidad, permitiendo la expansión sionista en el sur de Siria mientras abandona a la resistencia palestina y nacional.
Aunque las explosiones provocadas por las bombas suministradas por Estados Unidos transmiten una sensación de superioridad, en realidad indican que los israelíes están perdidos y son incapaces de encontrar un camino hacia la victoria.
El tiempo retrocedió a los estándares de la Segunda Guerra Mundial, para cuya superación se crearon las Organización de Naciones Unidas (ONU), la Declaración Universal de Derechos Humanos y el derecho internacional.