Es cierto que Netanyahu intensificó su agresión contra Cisjordania a finales de agosto y principios de septiembre de 2024 en términos del ritmo de los crímenes, la escala de la brutalidad y los asesinatos sangrientos. Sin embargo, ¿por qué esto ha desencadenado un alboroto mediático? Después de todo, la ocupación israelí no ha dejado de saquear la tierra y establecer asentamientos, ni la Cisjordania palestina ocupada ha estado nunca en calma, en particular durante los últimos 25 años, y mucho menos desde su ocupación en 1967 o durante la primera intifada que estalló en diciembre de 1987.

El crimen de CleansOcide (Genocidio y Limpieza Étnica) de Netanyahu y sus compinches han estado perpetrando en la asediada Franja de Gaza desde octubre de 2023 fue posible tras el regreso del ultraderechista Benjamín Netanyahu al cargo de primer ministro del gobierno de ocupación israelí el 29 de diciembre de 2022, armado con fuerzas fascistas "sionistas-religiosas", por lo que es doblemente importante evaluar una vez más su plan original conocido como "Anexión", que se esperaba que anunciara a principios de julio de 2020 cuando su aliado Trump estaba en el poder en la Casa Blanca, pero se retractó temporalmente de su anuncio.

Es cierto que las prácticas del gobierno de Bennett-Lapid eran racistas y practicaban las formas más atroces de opresión y asesinato en la Palestina Oriental ocupada en 1967, y que Netanyahu está en la extrema derecha... Sin embargo, la fusión de Netanyahu con lo que está a la derecha de la extrema derecha nos ofrece infinitos grados de la curva del fascismo.

Aunque el criminal de guerra Ariel Sharon, hasta la segunda intifada palestina (que estalló el 28 de septiembre de 2000) y el asedio de Yasser Arafat (2002-2004) y su consiguiente asesinato, fue un símbolo de las masacres y destrucciones perpetradas contra el pueblo palestino, lo que hizo Netanyahu desde que asumió el gobierno de ocupación a mediados de 1996 (con la excepción de un período hasta el advenimiento de Ehud Barak durante un breve período de negociación con Arafat en Camp David 2, y luego el advenimiento de Sharon hasta que cayó en coma y la asunción del poder de Ehud Olmert hasta su destitución y el regreso de Netanyahu al poder después de una década en 2009 hasta 2021) supera todo lo que hicieron los líderes de la ocupación israelí, independientemente de sus diferentes partidos políticos.

A pesar de que Netanyahu no inventó un nuevo producto fascista (es decir, el colonialismo de asentamiento), lo eclipsó con un fascismo descarado que podría, entre conmoción y despertar, apoderarse de toda Palestina en un proyecto que comenzó con la publicación del "Estado de los judíos" de Herzl, pasando por la declaración Balfour, la decisión de partir Palestina en 1947, la culminación de la Nakba hasta 1949. el revés de la ocupación de la segunda parte oriental de Palestina, los tratados de Oslo e incluso el proyecto de Trump llamado el "Acuerdo del Siglo" y el proyecto de "anexión". Lo que este ensayo no hace es abordar las posibles reacciones palestinas a las medidas adicionales que tomará Netanyahu.

De hecho, el documento el "Acuerdo del Siglo" se ocupa varias veces, especialmente en las páginas 8, 12, 13 y 14, de estos puntos, ya que se vuelve evasivo y se vincula con varias condiciones imposibles que han demostrado en el último cuarto de siglo haber sido colocadas en el marco de la provisión de un certificado de "buena conducta", pero no es más que un engaño para saquear más tierras. Dice así: "los líderes palestinos deben abrazar la paz reconociendo a "Israel" como un Estado judío, rechazando el terrorismo en todas sus formas, permitiendo acuerdos especiales que aborden las necesidades vitales de seguridad de "Israel" y de la región, construyendo instituciones eficaces y eligiendo soluciones pragmáticas. Si se dan estos pasos y se cumplen los criterios establecidos en esta visión, Estados Unidos apoyará el establecimiento de un Estado palestino". (Documento "Acuerdo del Siglo" - p. 8).

Saqueo entre partidos: "el Plan Allon de 1967"

El "Acuerdo del Siglo" es sólo una lectura clara de que el documento allana el camino para que Netanyahu intente hacer lo que quiera en Palestina. Es cierto que para servir a Netanyahu y a Trump, todos los planes existentes deben ponerse en una licuadora y volver a empaquetarse con el propósito de marketing político. Sin embargo, el pensamiento ideológico sobre el "derecho del pueblo judío", que fue "inventado", como se afirma, por ejemplo, en el documento del exministro Shaked (que utiliza símbolos religiosos aunque sea secular), no necesitó nuevas innovaciones. Las diversas propuestas políticas para extender el control de la ocupación sionista sobre el mayor porcentaje de las tierras de Palestina, incluidos los recursos naturales, y con las menores pérdidas materiales, se remontan directamente como un esquema "secular" capitalista sionista "moderno" a menos de un mes después de la Naksa (Retroceso) de 1967 y no necesariamente a la llegada de la extrema derecha de los colonos fascistas al poder.

La "patente" de la marginación del pueblo palestino y la destrucción de su patria pertenece a Yigal Allon, la figura secular del Partido Laborista que ocupó el cargo de ministro de Trabajo durante la ocupación de la segunda parte oriental de Palestina en 1967, y una figura con antecedentes militares, ya que dirigió la organización terrorista "El Palmaj" (1941) durante la Nakba, que se unieron a las organizaciones 'Etzel' (1931) y 'Lehi' (1940) para intensificar el terrorismo contra el gobierno del Mandato y los palestinos durante el período de preparación para el ataque contra Palestina.

En una sesión de gabinete el 19 de junio de 1967, Allon reconoció que la política exterior debería ser tan dinámica como los planes militares, y sugirió la anexión de al-Khalil [Hebrón] (al sur de al-Quds [Jerusalén] y Beit Lahm) para asegurar el control de Al-Quds ocupada. Sin embargo, regresó y se presentó formalmente a su gobierno el 13 de julio de 1967, bajo lo que se tituló "El Plan Allon".

El "Plan Allon" presentado al gobierno laborista (del primer ministro Levi Eshkol y el ministro de Seguridad Moshe Dayan) fundamentado en la ideología colonialista que cree en el derecho absoluto de los judíos a Palestina y en la aplicación de la seguridad y el control económico. Se basa en tres puntos:

La aplicación de la doctrina de la Torá sobre el derecho judío a Palestina: Trazado de fronteras de seguridad en tierras palestinas entre la ocupación y Jordania
Encontrar un método (el asentamiento y la extensión del control militar para robar recursos) para asegurar una mayoría judía para el llamado: "Estado judío democrático", y para esto, es posible dar a algunos palestinos una fórmula para manejar sus asuntos limitados solo en lo que respecta a las cuestiones de servicio
También sugería apoderarse de la mayor parte del valle del Jordán, devolver lo que no necesitaban a Jordania y establecer una frontera entre ellos, es decir, perder las fronteras exteriores de cualquier futura entidad palestina y controlar también un tercio de la Cisjordania ocupada.

Aunque la propuesta de Allon no fue adoptada oficialmente por el gobierno, se siguió el espíritu del plan y, a veces, las decisiones personales de él, como ministro, alentaron la colonización de la tierra desde finales de la década de 1960. Y sobre esta base, 'Ma'aleh Adumim', (ciudad cisjordana actualmente con 40 mil colonos) se estableció como una de las colonias más grandes al este de Al-Quds.

El plan de Allon fue descrito como un "compromiso" de la ocupación sionista entre los que querían "devolver los territorios ocupados" y los que querían conservarlos y establecer asentamientos en ellos. Yoram Cohen, el exjefe del Shin Bet, no tenía ninguna preocupación por la monotonía de repetir el mismo plan y no ser innovador. Lo que ha hecho recientemente es una "mezcla modificada" que tiene en cuenta algunos cambios sobre el terreno.

El control del Valle del Jordán

Cuando Allon presentó la idea de su plan para el Valle del Jordán inmediatamente después de la Naksa de 1967, el gobierno de ocupación mantuvo el asunto en secreto al principio, y los motivos  no fueron revelados. El tema era de gran importancia para Yigal Allon. Con el fin de controlar sus recursos naturales, la ocupación necesitaría asegurar sus bienes robados mediante la plantación de "guardias" como colonos.

Comprender la importancia del Valle del Jordán indica que la ocupación no es "estática", sino que es una serie de penetraciones y violaciones sistemáticas que se materializan en operaciones cambiantes y renovables. Cuando las ambiciones y los planes para las tierras de Palestina están en constante renovación, la toma gradual de estas tierras es un proceso diario al que se enfrentan los ciudadanos indígenas en su lucha obstinada y cualquier herramienta que puedan reunir.

La ocupación adoptó el método de desgaste para robar la tierra centímetro a centímetro, y esto es lo que sucedió y está sucediendo en todas las partes de Palestina en general, pero en la parte oriental ocupada en 1967 en particular ha llegado el momento de acabar con el Valle del Jordán.

El valle del Jordán o el "Ghors" (al-Aghwar) es la frontera entre Jordania y Palestina, lo que lo convierte en la frontera oriental y exterior, ya que se extiende desde Safad en el norte hasta el Negev en el sur. La superficie total supera los 700 mil dunums [unos 900 metros cuadrados], y su anchura (en diferentes puntos) oscila entre los 15 y los 30 km del río Jordán. Es el hogar de casi 70 mil ciudadanos palestinos en 27 reuniones permanentes en un área de 10 mil dunums, y docenas de reuniones pastorales y beduinas.

La superficie de tierra cultivable en el valle del Jordán es de 280 mil dunums, es decir, el 38,8 por ciento de la superficie total del valle del Jordán; Los palestinos usan 50 mil dunums. Mientras tanto, los colonos del valle del Jordán utilizaron 27 mil dunums de tierras agrícolas. La ocupación controla 400 mil dunums con el pretexto de utilizarlos como zonas militares cerradas, es decir, el 55,5 por ciento de la superficie total del valle del Jordán. Los residentes palestinos tienen prohibido practicar cualquier actividad agrícola, urbana o de cualquier otro tipo en estas áreas. La ocupación ha establecido 90 puestos militares en el Valle del Jordán desde su invasión en 1967. Por lo tanto, el control existe, pero no legalmente, y el proyecto de saqueo tiene como objetivo legitimar el control de la Ocupación.

Las zonas del Valle del Jordán se dividen en: Zonas A, bajo el control de la Autoridad Nacional Palestina, con una superficie de 85 kilómetros cuadrados, y el 7,4 por ciento de la superficie total del Valle del Jordán; la B compartida entre la Autoridad Palestina y la Ocupación, con una superficie de 50 kilómetros cuadrados, y representan el 4,3 por ciento de la superficie total del Valle del Jordán; y la C, bajo pleno control israelí con una superficie de mil 155 kilómetros cuadrados, y constituye la mayor superficie del Valle del Jordán con un 88,3 por ciento. Desde la invasión de 1967, y a pesar de la firma de los Acuerdos de Oslo hace más de un cuarto de siglo, la ocupación no ha dejado de cometer violaciones cotidianas. Detrás de la propaganda hay un proceso de expansión y saqueo para agotar los recursos naturales de esa área y privar a los palestinos de ellos.

En las tierras del Valle del Jordán palestino se encuentran 36 asentamientos, la mayoría de los cuales son agrícolas construidas sobre el robo de mil dunums, además del saqueo de otros 60 mil. La mayoría de las colonias pertenecen a los consejos regionales de asentamiento conocidos como Arvot Ha-yarden y Mejilot. Estas violaciones cotidianas provocan cambios profundos en el mapa demográfico, geográfico, militar y político y elimina el derecho palestino a establecer proyectos agrícolas en primer lugar.

Con el fin de eliminar el "obstáculo humanitario", la ocupación ha desplazado a más de 50 mil ciudadanos desde su ocupación en 1967, además de centros de población enteros con el pretexto de su residencia en zonas militares como el de la población de Khirbet al-Hadidiya en el norte del Valle.

Antes del desplazamiento viene la demolición. Por lo tanto, el Valle Palestino es testigo de continuas y repetidas demoliciones de comunidades por parte de la ocupación en su totalidad o en parte, como en las aldeas de Al-Ras Al-Ahmar y Atouf y Khirb Al-Farsieh, con el objetivo de desalojar y desplazar a pobladores para facilitar el saqueo de las tierras después de su depuración étnica. Según datos de B'Tselem entre 2006 y septiembre de 2017,  demoliieron al menos 700 viviendas en diferentes ciudades palestinas, además de los frecuentes desalojos de muchas comunidades residenciales con el pretexto de ejercicios militares y las consiguientes demoliciones y confiscaciones de propiedades.

La situación se agravó aún más con el establecimiento de los puestos de control "Hamra" y "Tayseer" en las entradas del Valle del Jordán, con el objetivo de utilizarlos en la política de cierre que adoptaron para impedir que los productos llegaran a los mercados palestinos. También separaron completamente el Valle del resto de la Ribera Occidental ocupada durante la segunda Intifada comenzada a finales de septiembre de 2000 con el fin de obstruir la llegada de agricultores y trabajadores palestinos.

Por lo tanto, el asalto de los "campamentos de verano" de la ocupación israelí a Cisjordania a finales del verano de 2024 no debe verse como una pura "operación militar", sino más bien como una táctica para lograr los objetivos de la estrategia más amplia para intentar controlar toda Palestina.

A esto hay que sumarle el criminal Muro de Separación y los cientos de puestos de control, el cerco económico, el continuo acaparamiento de tierras y el establecimiento de colonias en una zona (Cisjordania) 20 veces más grande que la Franja de Gaza, todo lo cualo nos llevaron a la conclusión de que los crímenes de la ocupación israelí para controlar la geografía y torturar/desalojar la demografía no han cesado desde 1948 y 1967.

Las tácticas (crímenes) de CleansOcide implementadas desde octubre de 2023 en la Franja de Gaza, ahora las trasladaron a Cisjordania a mayor escala y ya han matado a alrededor de mil palestinos desde octubre de 2023.