La ofensiva a gran escala que el mundo está sufriendo por parte de esa alianza de la muerte que conforman el sionismo y el imperialismo, con Benjamí Netanyahu y Domald Trump como sus máximos referentes, no deja de sorprender a medida que se van sumando acciones de una brutalidad pocas veces vistas.

El pueblo palestino, además de ser bombardeado intermitentemente, sufrir una situación de hambruna extrema y no tener más soporte para subsistir que sus propias fuerzas y la esperanza de un futuro emancipatorio (sin esos dos elementos, es dificil que no se sucumba), ahora se entera por el boca a boca, ya que tampoco hay ya el mínimo servicio de internet que los comunicaba con el mundo exterior, que el primer ministro genocida de la entidad sionista lo propone a Trump como Premio Nobel de la Paz, por "sus grandes aportes" a la misma.

No es una broma, este tipo de gente está acostumbrada a la impunidad como estilo de vida. Por eso, quienes más puntos suman para ser juzgados como criminales de guerra, se dan el lujo de candidatearse, haciendo gala de un pacifismo bañado en sangre, y lanzar diariamente discursos de odio para justificar sus vesanías. Ambos, y sus cómplices habituales hablan de paz mientras siguen sosteniendo una guerra desigual en la que los cadáveres y los escombros inundan de tristeza y horror lo que hasta hace menos de dos años albergaba una ciudad con una personalidad especial, surgida de la resistencia de todo un pueblo.

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Es totalmente cierto, que mencionar a Gaza le provoca a la mafia judeo-norteamericana una sensación similar al que sienten los opresores cobardes cuando se los desenmascara. El saber que mientras un solo palestino quede con vida, no podrán dormir tranquilos por todos los crímenes cometidos. Ese escalofrío que seguramente recorre el cuerpo y el cerebro de muchos de los soldados sionistas que asesinan por diversión, que aplican torturas inimaginables en las prisiones de exterminio o se ensañan con los pocos medios de comunicación que están en los territorios ocupados, informando de qué dimensión es este nuevo Holocausto.

En este último rubro, la constatación de que alrededor de 225 periodistas fueron asesinados, la gran mayoría de ellos en Gaza, habla por sí sola de que la entidad sionista no deja de perseguir implacablemente a quienes, al riesgo de su propia vida, cuentan la verdad sobre el genocidio. A eso se suman las detenciones, como la más reciente, en la Cisjordania ocupada, del responsable de la cadena panárabe Al Mayadeen, el conocido comunicador Nasser Al-Lahham, quien fue enviado a la prisión de exterminio de Offer.

#VIDEO | 📢AL MAYADEEN CONDENA INTENTO DE “ISRAEL” DE SILENCIAR LA VOZ DE PALESTINA

❗️Así expresaron los trabajadores de Al Mayadeen su solidaridad con el jefe de la oficina de la red panárabe en la Palestina Ocupada, Nasser Al-Lahham, quien fue arrestado por las fuerzas de… pic.twitter.com/7AlVfw06O3

— Al Mayadeen Español (@almayadeen_es) July 8, 2025

En ese marco, teniendo en cuenta que las cifras reales de palestinos y palestinas asesinadas supera con creces los 150 mil, o que hay familias enteras de las que ya no queda un solo miembro de la misma, después de siglos de existencia en la zona, hablar de Premio Nobel de la Paz para los verdugos es algo más que una provocación. A eso se le agrega que la colaboración con el sionismo de países europeos,  que siguen vendiendo armas a "Israel", o irrespetan la orden de la  Corte Internacional de Justicia de detener a Netanyahu. Por el contrario, esta misma semana, Italia, Francia y Grecia le abrieron el espacio aéreo para que el monstruo de "Tel Aviv" viajara sin inconvenientes. De esta manera, le otorgan al ejecutor de crímenes de lesa humanidad la posibilidad de que siga haciéndolo sin mayores preocupaciones.

El papel de las embajadas sionistas

Otro elemento a tener en cuenta en el circuito del respaldo a las brutalidades sionistas es el papel que desempeñan las embajadas israelíes en distintos países. Allí está el caso de Argentina, donde "Israel" no solo tiene diplomáticos y entidades paralelas que se dedican a hostigar a todo aquel que se identifique con el pueblo palestino, sino que además el propio presidente Milei y su ministra de Seguridad, se han convertido en la mayor referencia de apoyo al genocidio, imitando a Donald Trump. En ese sentido, Argentina vota a favor de "Israel" en foros internacionales, permite que colonos-soldados israelíes se paseen por la Patagonia como si fuera territorio propio, y en el colmo de la colonización israerlo-estadounidense, envían marinos para respaldar a las tropas imperiales que hostigan a Yemen.

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Con esa misma prepotencia y contando con complicidades internas, el resto de las embajadas sionistas en Nuestramérica enjuician con total descaro a políticos, académicos u organizaciones sociales que apoyan a Palestina. Piden prisión para ellos y si eso no sucede, acusan a los gobiernos de antisemitas, por no cumplir con "su" mandato.

Eso es lo que ocurrió esta semana en el Estado español, cuando la embajada de la estrella de David, con el apoyo de la prensa afín (o sea casi toda) criminalizó a las decenas de miles de vascos y vascas que en la tradicional fiesta de San Fermín, en Pamplona, vivaron a Palestina.Y lo hicieron tanto desde el palco central como desde el llano. Allí, el colectivo Yala Navarra con Palestina, fue quien abrió la fiesta con un discurso reivindicativo de ese pueblo valiente que resiste y pelea contra sus opresores.  

Abajo, en la plaza frente al Ayuntamiento, en los balcones que rodean la misma, y en cada rincón de la ciudad, la bandera palestina flameaba orgullosa, enmarcando ese sentimiento de solidaridad internacionalista, y un coro de miles de personas, respondieron a la vez con gritos de "Palestina libre". Para que ese estallido de voces solidarias se pudiera escuchar simbólicamente en los confines de Khan Yunis, Al-Mawasi o Tulkarem.

Esto es lo que la siniestra embajada ni el gobierno que representan jamás van a entender. El sentimiento palestino ya no está solamente enclavado en territorio árabe, sino que vive y palpita en los millones de hombres y mujeres que en el mundo apoyan su causa, que boicotean sus productos, que se niegan a viajar a "Israel" a pesar de recibir invitaciones "tentadoras", que denuncian a los asesinos en todos los ámbitos.

Esta decisión de desenmascarar las mentiras del sionismo y sus colaterales, es parte de una victoria que se va construyendo día a día, derivada del enorme esfuerzo que la resistencia palestina viene haciendo desde 1948, y que a partir del 7 de octubre de 2023 cobró dimensiones de epopeya.